Salmo 24, 4-5b. 6. 7b-9
Muéstrame, Señor, tus caminos. Muéstrame, Señor, tus caminos, enséñame tus senderos. Guíame por el camino de tu fidelidad; enséñame, porque Tú eres mi Dios y mi salvador. Acuérdate, Señor, de tu compasión y de tu amor, porque son eternos. Por tu bondad, Señor, acuérdate de mí según tu fidelidad. El Señor es bondadoso y recto: por eso muestra el camino a los extraviados; Él guía a los humildes para que obren rectamente y enseña su camino a los pobres.